Desde hace ya más de 10 años, las bebidas vegetales han desplazado el consumo de leche de vaca en los niños . ¿Por qué es esto problemático y qué consecuencias para la salud se esperan?

Los sustitutos de la leche a base de plantas se elaboran predominantemente a partir de cuatro alimentos vegetales: soja, avena, almendras y chícharo. Sin embargo, la mayoría de las alternativas a la leche son nutricionalmente desequilibradas en comparación con la leche de vaca. Por lo tanto, cambiar de la leche de vaca a alternativas de origen vegetal puede tener consecuencias para la salud a corto y largo plazo.

¿Qué han encontrado los estudios y qué se recomienda?

Los estudios demuestran que la leche de vaca contribuye significativamente a lograr que los bebés y niños tengan una alimentación completa y mejora:

• El crecimiento lineal.
• Estado de la vitamina D.
• La salud ósea.

Las bebidas vegetales no cubren las necesidades nutricionales de los bebés, descuidando el crecimiento lineal, el estatus de la vitamina D y por consiguiente la salud ósea, provocando deficiencias nutricionales que pueden comprometer el crecimiento normal.

Recomendaciones generales:

1. Iniciar la alimentación del recién nacido con leche materna o el uso de una fórmula infantil fortificada con hierro.
2. En caso de alergia a la proteína de la leche de vaca, se pueden utilizar otras fórmulas diseñadas para este fin. Estos son casos excepcionales y deben discutirse con el pediatra responsable.

La leche de vaca juega un papel importante en la ingesta de proteínas de los bebés y niños pequeños. No es sólo una cuestión de cantidad, sino también de calidad. Las bebidas no lácteas de origen vegetal tienen un menor contenido y calidad de proteínas.

Las bebidas a base de soja ya no se recomiendan en el primer año de vida por el alto riesgo de desarrollar alergia alimentaria. Los bebés y los niños que tienen alergia a la proteína de la leche de vaca pueden desarrollar enterocolitis (inflamación del intestino delgado y grueso) cuando se les dan bebidas a base de soja, lo que también se ha informado con otras bebidas a base de plantas.

Carencias provocadas por las bebidas de origen vegetal y sus consecuencias

El uso de sucedáneos de la leche a base de plantas que no son adecuados para bebés y niños pequeños tiene un efecto negativo en su crecimiento y desarrollo.

Riesgo de enfermedades por deficiencia de nutrientes clave

Los estudios muestran una asociación en el consumo de bebidas a base de soya y el desarrollo de raquitismo (deficiencia de calcio y vitamina D, debilitamiento de la sustancia ósea), bebidas a base de arroz con kwashiorkor (malnutrición proteico-energética) y bebidas a base de almendras con raquitismo y escorbuto (enfermedad por deficiencia de vitamina C).

En su mayor parte, los sustitutos de la leche a base de plantas no podían satisfacer las necesidades nutricionales (especialmente las necesidades de proteínas) de los bebés y niños pequeños. Las deficiencias nutricionales también pueden ocurrir en niños mayores y adolescentes, especialmente si existen otras restricciones alimentarias y se omite la leche de vaca por completo.

Hay informes de hiperoxaluria (niveles elevados de ácido oxálico en la orina) debido al consumo de bebidas a base de almendras que provocan cálculos renales, así como informes de deficiencia de vitamina A debido a una alimentación selectiva que conduce a la ceguera.